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sábado, 9 de enero de 2010

LA MERCENARIA YOANI SÁNCHEZ Y LA LABOR DEL ""CONTRATISTA"" ESTADOUNIDENSE APRESADO EN CUBA

Por M. H. Lagarde


Una vez más la bloguera mercenaria Yoani Sánchez ha dejado claro cuál es el papel que deben desempeñar las nuevas tecnologías en su enfrentamiento al gobierno de Cuba. En una entrevista para el periódico francés Le Monde Sánchez opinó que "No creo que internet sea la herramienta principal del cambio en Cuba, pero creo que es un elemento importante porque permite esquivar una de las mayores armas del régimen: el monopolio de la información", respondió. No obstante, entiende que "internet contribuye a quebrar la fidelidad ideológica al sistema".

La bloguera que en sus post ha llamado reiteradamente a la subversión en Cuba y hasta “una noche de cuchillos largos”, asegura que "El ciberespacio es imparable. No necesita visa de entrada ni permiso de salida".

Pero lo que si necesita visa de entrada y de salida son los agentes secretos que surten con tecnología destinada a la subversión a los llamados “grupos informales” de la “sociedad civil”, en realidad, mercenarios al servicio del gobierno de Estados Unidos.

Después de que fuera apresado el pasado 5 de diciembre, un supuesto subcontratista de Development Alternatives Inc. (DAI) quien "regalaba" sofisticados equipos de telecomunicaciones, ya sabemos más a o menos a qué se refería Obama cuando aseguraba que deseaba el desarrollo de la internet en Cuba.

Según el Nuevo Herald "analistas consideran que probablemente los equipos están diseñados para ayudar a los cubanos a hablar o visitar la internet vía satélite, sorteando la red del gobierno". O sea, para el mismo fin que dice en su entrevista la mercenaria Yoani.

Es curioso que, después de la detención del contratista, la bloguera ha ocupado buena parte de su tiempo -especialmente por twitter-, a desdecirse sobre la manera que suele acceder a internet.

La mercenaria, y sus más cercanos acólitos, ahora no solo andan tratando de justificar de dónde salen los muchos traductores voluntarios de Generación Y, sino también que agradecen a aquellos que reciben sus sms y twittean sus mensajes. Hace poco una semanas –cuando sacó las muletas de Valladares- la bloguera mercenaria se llenaba la boca presumiendo de que podía mandar sus twitter desde su móvil, un servicio que por cierto, no se ofrece en Cuba.

Testigos que participaron en la payasada de Fresa y Chocolate, aquel día memorable que Yoani Sánchez se disfrazó con peluca alemana, aseguran que mientras se debatía sobre la internet en la cultura, la mercenaria twitteaba desde un sofisticado artefacto.

Según fuentes de periodistas españoles ella posee una sustanciosa cuenta en un banco de España debido a sus incontables premios, como ella ha asegurado, porque trabaja como guía turística y profesora de alemán para poder conectarse como hacia, hasta hace poco, en lujosos hoteles habaneros.

Pero ahora resulta que tampoco tiene dinero para acceder a la red, razón por la que les pidió a los periodistas de Le Monde que la entrevista fuese vía telefónica.

Pero no es nuevo que Yoani Sánchez mienta. Para eso, precisamente, es que le pagan los mismos que envían a agentes surtir a la contrarrevolución de adelantos tecnológicos destinados a subvertir el orden en Cuba.

Estos, por cierto, tampoco se quedan atrás a la hora de hacerse los chivos locos. El portavoz del Departamento de Estado, P.J. Crowley declaró recientemente a la prensa: "Esta persona no tiene relación alguna con nuestros servicios de inteligencia''.

Según Boomgard, el hombre, cuyo nombre se desconoce, es "un entregado profesional del desarrollo con muchos años de experiencia en brindar ayuda humanitaria y de progreso en todo el mundo'' y trabajaba como subcontratista de DAI en un programa de la Agencia de Desarrollo Internacional de EEUU (U.S. AID) cuyo objetivo es brindar ayuda “humanitaria” a los cubanos.

Según El Nuevo Herald dicho programa se propone acelerar la "transición hacia la democracia'' en Cuba, erosionando las restricciones informativas del gobierno en cuanto a las computadoras y los teléfonos celulares.

El programa contaba con un presupuesto de $3.5 millones hace una década, y el Congreso aprobó $45 millones en el 2008. Development Alternatives Inc. administra una parte del mismo por un total de $8.6 millones.

Pero ni en los propios Estados Unidos le han creído el cuento al vocero del Departamento de Estado del samaritano subcontratista interesado en que los cubanos puedan conectarse a la red.

Wayne Smith, ex diplomático estadounidense que dirigió la misión de EEUU en La Habana durante la crisis del Mariel, citado por El Herald , asegura: "Si el hombre estuvo distribuyendo teléfonos de satélite y otros equipos de alta tecnología, Washington podría verse en dificultades para justificarlo. Si lo hubieran agarrado simplemente con un teléfono celular, incluso si no hubiera tenido los documentos debidos, ellos simplemente lo hubieran expulsado'', subrayó Smith, quien sigue teniendo estrechas relaciones con funcionarios del gobierno de La Habana. ‘‘Me asombra el hecho de que Estados Unidos no haya hecho un escándalo por esto. Si yo estuviera allá ocupándome del caso, y el hombre no hubiera hecho nada de importancia, yo estuviera armando escándalo”.

Igualmente afirmó en el mismo diario Phil Peters, experto en Cuba del Instituto Lexington, un grupo de estudio radicado en Virginia:

"Esto era una bomba de tiempo. Está escrito en blanco y negro en las leyes estadounidenses: la intención de este programa es derrocar al gobierno. ‘Transición' es una palabra bien escogida, pero la intención es ‘derrocar'. Las personas

CELIA: UNA FLOR QUE NO SE MARCHITA

Eres el agua cristalina del arroyo que corre en los recodos serranos. Eres el cantar del sinsonte dueño de la espesura. Eres, sencillamente, el pétalo de la flor más hermosa de la llanura.



Estás en esos árboles que circundan tu casa. Estás en los cañaverales y en el azúcar que de ellos sale. Estás en el sudor de los obreros, en la humildad del campesino, en la sonrisa de la mujer apasionada que asume tu historia.

Sigues junto a nosotros, los cubanos de hoy que siembran la belleza que forjaste con tus manos de guerrillera y de artista. Sigues acompañándonos en tiempos difíciles, cual bandera lista para iniciar la marcha en aras del bien común.

No descansaste nunca. Desde aquel instante definitorio te mantuviste despierta, preparada para romper las ataduras oprobiosas del pasado y construir una patria digna del mejor de los esfuerzos.

No descansaste nunca porque así te lo propusiste, y porque el descanso para las heroínas suele ser una herejía. Esa es la razón por la que te mantienes viva, como expresión de lo más raigal de la cubanía que se traduce en libertad, independencia, soberanía.

En lo más alto de la montaña se mantiene el eco de tus pasos, las flores guardan tu fragancia, las palmas reales irradian tu rostro desde sus penachos, mientras el tocororo con sus colores patrios, lanza al viento una sinfonía en tu memoria.

Aquí en estas tierras donde eres luz permanente, la arena de la playa dibuja con el esplendor de la mañana, el vuelo de una mariposa que escribe tu nombre en el cielo de la patria.

La dulzura, la lealtad, la firmeza, el amor, la constancia, la sensibilidad y la ternura, tienen un nombre: Celia Sánchez Manduley.